martes, 31 de enero de 2012

Las manos en el barro

Aquí os dejamos un artículo de nuestro socio Luis Foronda:
De vez en cuando, el filósofo miraba sus manos y se lamentaba diciendo: ¡Qué pequeñas son mis manos en relación con todo lo que la vida ha querido darme! El mundo está lleno de cosas maravillosas, tan enormes, tan bellas, que nuestras manos siempre se quedan pequeñas, incapaces de abarcarlas. Ante semejante desgracia, nos hemos resignado a que las manos, simplemente, acaben yendo al pan. Pero el hombre además, con sus manos, es capaz de partirlo y de llevárselo a la boca. Quiero decir que las manos alimentan, siembran y siegan,  acarician, dibujan una línea sinuosa en la piel expectante, una mano estrecha otra mano, se abre y se entrelaza, una mano se hace y se deshace, ondea las banderas, hace brotar todas las artes, saca la música de las cuerdas, las palabras del lápiz, los retratos del pincel, la mano se hace puño, golpea, sostiene el puñal, hace girar la onda que derribará al gigante, aplasta la mosca, la mano arroja y recoge, adivina  el porvenir,  la mano levanta el muro y lo pinta, hace la casa y la derriba, construye el cohete, cierra los ojos del muerto y recoge al niño que acaba de nacer. A lo largo de la historia todo ha sido hecho con las manos del hombre, pero en el último siglo nos hemos creído que las máquinas lo harían todo por nosotros, que nuestro futuro sería un vivir sin dar golpe, un estar “mano sobre mano”. Sin embargo ahora las manos siguen siendo utilizadas en la misma medida que hace siglos o más, la azada del agricultor es el “tablet” del ejecutivo, sostenido por las mismas manos temblorosas, preocupadas por el negro porvenir. El alma del hombre no se manifiesta a través de sus ojos y ni siquiera de sus palabras, se manifiesta a través de sus manos.


Consciente de ello, hace unos días, la Asociación en Defensa de Ubeda Patrimonio de la Humanidad, Plaza Vieja, entregaba sus premios anuales. Este año ha sido premiado el colectivo de alfareros ubetenses. Úbeda, ciudad de cíclopes de piedra, de edificios fantásticos, cuenta con el patrimonio hermosísimo de su alfarería, que ya estaba ahí antes incluso de que existieran los monumentos. El arte callado y constante de la cerámica ha sabido conservar como ninguno su esencia y su sentido, siempre vivo a través de varias generaciones, abuelos, hijos y nietos, enamorados del barro. Artistas que han mantenido las mismas técnicas ancestrales, pero que han sabido abrirse al mundo, innovando sin perder su autenticidad, en cada vuelta del torno. La entrega del premio fue un acto emocionante, un momento único, casi histórico, ver juntos a todos esos maestros a los que Úbeda les debe tanto.
Qué grandes son las manos del alfarero, las únicas capaces de abarcar, de sostener y de modelar toda la belleza del mundo.

Luis Foronda. Diario Jaén. Enero 2012

lunes, 30 de enero de 2012

Noticia Diario Jaén: El cardenal Carlos Amigo se pronuncia sobre el Patrimonio de la ciudad de Úbeda


El cardenal Carlos Amigo Vallejo, quien fuera arzobispo en Sevilla, visitó la ciudad renacentista. Fue recibido por el alcalde José Robles, con quien compartió unos momentos en el Ayuntamiento. Después de la recepción, estampó su firma en el Libro de Honor.

El alcalde, José Robles, en representación de la ciudad, recibió al cardenal emérito y arzobispo emérito de Sevilla, monseñor Carlos Amigo Vallejo. De esta forma, respondió, agradecido, a la invitación institucional que se le formuló, con motivo de su estancia en Úbeda, donde comparte unas jornadas de reflexión y formación espiritual con la Orden de los Carmelitas Descalzos.

El máximo responsable municipal y Amigo Vallejo aprovecharon su encuentro para intercambiar impresiones sobre cuestiones de actualidad. “Siempre que vengo, descubro cosas nuevas en Úbeda, muy conocida por muchas razones, históricas o culturales. He venido para ofrecer unas conferencias y, entre una y otra, pude descubrir el paseo, la ronda que han abierto en la muralla. Es una auténtica delicia caminar por allí”, dijo. El prelado confesó, además, haber disfrutado de una visita nocturna por el centro histórico. El cardenal Carlos Amigo Vallejo se reunió con el alcalde tras recibir, el pasado miércoles, en el Real Alcázar de Sevilla, el Premio Manuel Clavero, que reconoce los méritos humanos, sociales y culturales de quien fue arzobispo de la Diócesis de Sevilla entre 1982 y 2009 y es cardenal desde 2003. No en vano, se le considera una figura esencial en Andalucía.

Amigo Vallejo destacó, durante su estancia en las dependencias municipales, la belleza de la ciudad ubetense y su riqueza monumental y patrimonial y mostró además un especial interés por la intervención municipal para la mejora en la limpieza y adecuación de la muralla de La Saludeja, en la Ronda de Miradores, una zona que conoce. Por su parte, el alcalde, José Robles, manifestó su satisfacción por acoger la visita del cardenal emérito y se congratuló de su estrecha vinculación con la ciudad y con la Orden de los Carmelitas Descalzos de Úbeda. “Hemos querido que se lleve una prueba de que Úbeda le quiere. Ha sido un placer poder estar con él y aprender de una persona con una experiencia tan inmensa”, dijo. Tras la conversación, Robles invitó al cardenal a firmar en el Libro de Honor del Ayuntamiento.

Sin comentarios: ¿Salvajismo o solución?

Las imagenes hablan por si solas.Contenedores soterrados de la Plaza de San Pedro.


sábado, 28 de enero de 2012

Las huertas históricas de Úbeda en peligro

Articulo de nuestro socio Sebastián Lozano Mudarra. Link: http://huertadelosfrailes.blogspot.com/ 

Dice Esteban, de la asociación de los hortelanos de la redonda de miradores de Úbeda, que esta ciudad no puede entender su existencia sin las vitaminas que suministraban sus huertas de debajo de sus murallas. Porque había agua y huertas nacieron las iglesias, los palacios renacentistas, los torreones medivales, la calle Real y el Palacio Vela de los Cobos. La ciudad histórica es nuestra Alhambra, y nuestras huertas deben ser nuestro Generalife. Sin embargo, sus jardineros, los hortelanos, cada vez son menos, y pareciera que se trabaja para que no quede ninguno.




Hoy se han reunido con la asociación en defensa del patrimonio Plaza Vieja, en una visita guiada por los senderos que zigzaguean entre muros de piedra derruidos, albercas y minados centenarios, tablas de habas y cebollas, cantos de "arcanciles", olivares invasores de lo que fueron antes huertas, basura moderna de envases de plástico, tuberías de goma de todos los calibres, sofás y retretes abandonados, y eriales tristes quemados por el abandono y la mala leche.


Son decenas de hectáreas que abrazan en pendiente el sur de la ciudad en una sucesión interminable de terrazas que buscan el fondo del valle del rio Guadalquivir.. Regadas por el agua que mana bajo la ciudad a través de minados que durante siglos construyeron con inteligencia, para verter en una sinfonía de albercas comunicadas por regueros superficiales, constituyendo un ecosistema extraordinario e irrepetible, que surtía de hortalizas los mercados locales.


En la década de los setenta del pasado siglo, con la apertura del Merca Úbeda, nuestros mercados se inundaron de productos baratos procedentes de la agricultura intensiva de Almería y Murcia. Los hortelanos se vieron obligados a abandonar la actividad. Las huertas entraron en decadencia, y los olivos, apoyados con las subvenciones europeas, empezaron a sustituir las tomateras, patateras, lechugas, ajos, alcachofas, higueras y granados. El paraíso comenzó a tornarse en un lienzo igual que todas las campiñas de Jaén: en un desierto de olivos. Con la amenaza cierta de transformarse, si nos descuidamos, en urbanizaciones.

 

Sin embargo, para mi sorpresa, he descubierto hoy que aún resisten muchas hectáreas de huerta, cuidadas por románticos vinculados por el afecto a la tierra heredado de generaciones. Además tienen visión y ganas de recuperar ese gran espacio patrimonial de la ciudad. Porque estamos hablando de valores paisajísticos, pero también de valores etnográficos, ambientales, y arquitectónicos. Es en las huertas donde quedan los restos de las primeras iglesias cristianas de la ciudad, anteriores a Santa María, todas ellas extramuros.
Las soluciones pasan por una batería de acciones en varias direcciones al mismo tiempo. Una tiene que ser para revalorizar los productos hortícolas mediante cultivos ecológicos y etiqueta que certifique su procedencia. Otra pasa por favorecer las actividades complementarias turísticas y pedagógicas de la actividad agraria como complemento de renta, y para ello hay que realizar las modificaciones pertinentes del planeamiento urbano. Y finalmente es preciso recuperar el patrimonio presente en los muros de los caminos, las albercas, los minados, regueras, etc. Construyamos nuestro particular Generalife con el apoyo de todos.
 

viernes, 27 de enero de 2012

Vídeo sobre la entrega de premios

Ya podéis ver en la web IDEAL Úbeda un vídeo resumen sobre la entrega de los premios de la Asociación Plaza Vieja... Se reconoció en positivo al gremio de alfareros y en negativo al arqueólogo municipal... Además, fue impartida una conferencia sobre la desconocida cerámica azul ubetense.. Las imágenes y el montaje son del compañero Antonio Ángel Ruiz..


Link:http://link.brightcove.com/services/player/bcpid982198441001?bckey=AQ~~,AAAAFDJ-STk~,O_UTJPLxsFCyVlftGJGD0n7W7wC8OZxz&bclid=982259647001&bctid=1410504801001

miércoles, 25 de enero de 2012

Sin Comentarios: Aplaudamos el mal gusto de ALCISER en el casco histórico.

Los monolitos propagandísticos que han aparecido de la noche a la mañana en el casco histórico, y en concreto delante o cerca de edificios BIC (bien de interés cultural) de la ciudad.  Seguro que los han puesto porque eran muy necesarios para la ciudad ¿y para el turista?.



¿Por qué el León de Chocolate al arqueólogo municipal?


Plaza Vieja ha acordado otorgar el “Premio León de Chocolate 2012” al Arqueólogo Municipal por “la actuación de la Oficina Arqueológica de Úbeda en relación con el seguimiento arqueológico llevado a cabo en el proceso de construcción del espacio denominado Sinagoga del Agua”.

Plaza Vieja ha solicitado, sin obtener respuesta alguna, información a los dos últimos alcaldes de Úbeda sobre este espacio y ha organizado una mesa redonda con personalidades del ámbito del patrimonio histórico-artístico dirigida a buscar información y conocimiento sobre aspectos relacionados con su autenticidad. A este acto fue invitado el arqueólogo municipal para que aportara la información de que disponía, pero declinó la invitación.

Según uno de los gerentes de la empresa de servicios turísticos que gestiona este “hallazgo”, “se ha sacado a la luz y puesto en valor lo que se ha ido encontrando durante las obras "siempre con todos los permisos de obras y la supervisión del arqueólogo municipal”. Si eso es cierto, ¿por qué igualmente no se ha sacado a la luz pública toda esta documentación?

Pensamos que el caso de la "Sinagoga del Agua" es un caso insólito por el cúmulo de irregularidades reveladas en su nacimiento, una intervención que, hasta donde Plaza Vieja sabe, y a pesar de lo que aseguran sus administradores sin aportar documento alguno, ha carecido de cualquier seguimiento arqueológico, lo cual demuestra una vez más la incompetencia o desidia mostradas (algo a lo que ya nos tiene acostumbrados) por nuestro Ayuntamiento que, en este caso y de manera flagrante, no ha cumplido ni está cumpliendo con su obligación.

Mientras tanto, haciendo nuestras las tres preguntas que la Directora del Museo Provincial de Jaén y miembro de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la provincia formuló en aquel acto, volvemos a repetirlas hoy a quien corresponda: 

¿Dónde está el informe arqueológico?, ¿quién lo hizo? y ¿dónde está el inventario?