martes, 31 de enero de 2012

Las manos en el barro

Aquí os dejamos un artículo de nuestro socio Luis Foronda:
De vez en cuando, el filósofo miraba sus manos y se lamentaba diciendo: ¡Qué pequeñas son mis manos en relación con todo lo que la vida ha querido darme! El mundo está lleno de cosas maravillosas, tan enormes, tan bellas, que nuestras manos siempre se quedan pequeñas, incapaces de abarcarlas. Ante semejante desgracia, nos hemos resignado a que las manos, simplemente, acaben yendo al pan. Pero el hombre además, con sus manos, es capaz de partirlo y de llevárselo a la boca. Quiero decir que las manos alimentan, siembran y siegan,  acarician, dibujan una línea sinuosa en la piel expectante, una mano estrecha otra mano, se abre y se entrelaza, una mano se hace y se deshace, ondea las banderas, hace brotar todas las artes, saca la música de las cuerdas, las palabras del lápiz, los retratos del pincel, la mano se hace puño, golpea, sostiene el puñal, hace girar la onda que derribará al gigante, aplasta la mosca, la mano arroja y recoge, adivina  el porvenir,  la mano levanta el muro y lo pinta, hace la casa y la derriba, construye el cohete, cierra los ojos del muerto y recoge al niño que acaba de nacer. A lo largo de la historia todo ha sido hecho con las manos del hombre, pero en el último siglo nos hemos creído que las máquinas lo harían todo por nosotros, que nuestro futuro sería un vivir sin dar golpe, un estar “mano sobre mano”. Sin embargo ahora las manos siguen siendo utilizadas en la misma medida que hace siglos o más, la azada del agricultor es el “tablet” del ejecutivo, sostenido por las mismas manos temblorosas, preocupadas por el negro porvenir. El alma del hombre no se manifiesta a través de sus ojos y ni siquiera de sus palabras, se manifiesta a través de sus manos.


Consciente de ello, hace unos días, la Asociación en Defensa de Ubeda Patrimonio de la Humanidad, Plaza Vieja, entregaba sus premios anuales. Este año ha sido premiado el colectivo de alfareros ubetenses. Úbeda, ciudad de cíclopes de piedra, de edificios fantásticos, cuenta con el patrimonio hermosísimo de su alfarería, que ya estaba ahí antes incluso de que existieran los monumentos. El arte callado y constante de la cerámica ha sabido conservar como ninguno su esencia y su sentido, siempre vivo a través de varias generaciones, abuelos, hijos y nietos, enamorados del barro. Artistas que han mantenido las mismas técnicas ancestrales, pero que han sabido abrirse al mundo, innovando sin perder su autenticidad, en cada vuelta del torno. La entrega del premio fue un acto emocionante, un momento único, casi histórico, ver juntos a todos esos maestros a los que Úbeda les debe tanto.
Qué grandes son las manos del alfarero, las únicas capaces de abarcar, de sostener y de modelar toda la belleza del mundo.

Luis Foronda. Diario Jaén. Enero 2012

lunes, 30 de enero de 2012

Noticia Diario Jaén: El cardenal Carlos Amigo se pronuncia sobre el Patrimonio de la ciudad de Úbeda


El cardenal Carlos Amigo Vallejo, quien fuera arzobispo en Sevilla, visitó la ciudad renacentista. Fue recibido por el alcalde José Robles, con quien compartió unos momentos en el Ayuntamiento. Después de la recepción, estampó su firma en el Libro de Honor.

El alcalde, José Robles, en representación de la ciudad, recibió al cardenal emérito y arzobispo emérito de Sevilla, monseñor Carlos Amigo Vallejo. De esta forma, respondió, agradecido, a la invitación institucional que se le formuló, con motivo de su estancia en Úbeda, donde comparte unas jornadas de reflexión y formación espiritual con la Orden de los Carmelitas Descalzos.

El máximo responsable municipal y Amigo Vallejo aprovecharon su encuentro para intercambiar impresiones sobre cuestiones de actualidad. “Siempre que vengo, descubro cosas nuevas en Úbeda, muy conocida por muchas razones, históricas o culturales. He venido para ofrecer unas conferencias y, entre una y otra, pude descubrir el paseo, la ronda que han abierto en la muralla. Es una auténtica delicia caminar por allí”, dijo. El prelado confesó, además, haber disfrutado de una visita nocturna por el centro histórico. El cardenal Carlos Amigo Vallejo se reunió con el alcalde tras recibir, el pasado miércoles, en el Real Alcázar de Sevilla, el Premio Manuel Clavero, que reconoce los méritos humanos, sociales y culturales de quien fue arzobispo de la Diócesis de Sevilla entre 1982 y 2009 y es cardenal desde 2003. No en vano, se le considera una figura esencial en Andalucía.

Amigo Vallejo destacó, durante su estancia en las dependencias municipales, la belleza de la ciudad ubetense y su riqueza monumental y patrimonial y mostró además un especial interés por la intervención municipal para la mejora en la limpieza y adecuación de la muralla de La Saludeja, en la Ronda de Miradores, una zona que conoce. Por su parte, el alcalde, José Robles, manifestó su satisfacción por acoger la visita del cardenal emérito y se congratuló de su estrecha vinculación con la ciudad y con la Orden de los Carmelitas Descalzos de Úbeda. “Hemos querido que se lleve una prueba de que Úbeda le quiere. Ha sido un placer poder estar con él y aprender de una persona con una experiencia tan inmensa”, dijo. Tras la conversación, Robles invitó al cardenal a firmar en el Libro de Honor del Ayuntamiento.

Sin comentarios: ¿Salvajismo o solución?

Las imagenes hablan por si solas.Contenedores soterrados de la Plaza de San Pedro.


sábado, 28 de enero de 2012

Las huertas históricas de Úbeda en peligro

Articulo de nuestro socio Sebastián Lozano Mudarra. Link: http://huertadelosfrailes.blogspot.com/ 

Dice Esteban, de la asociación de los hortelanos de la redonda de miradores de Úbeda, que esta ciudad no puede entender su existencia sin las vitaminas que suministraban sus huertas de debajo de sus murallas. Porque había agua y huertas nacieron las iglesias, los palacios renacentistas, los torreones medivales, la calle Real y el Palacio Vela de los Cobos. La ciudad histórica es nuestra Alhambra, y nuestras huertas deben ser nuestro Generalife. Sin embargo, sus jardineros, los hortelanos, cada vez son menos, y pareciera que se trabaja para que no quede ninguno.




Hoy se han reunido con la asociación en defensa del patrimonio Plaza Vieja, en una visita guiada por los senderos que zigzaguean entre muros de piedra derruidos, albercas y minados centenarios, tablas de habas y cebollas, cantos de "arcanciles", olivares invasores de lo que fueron antes huertas, basura moderna de envases de plástico, tuberías de goma de todos los calibres, sofás y retretes abandonados, y eriales tristes quemados por el abandono y la mala leche.


Son decenas de hectáreas que abrazan en pendiente el sur de la ciudad en una sucesión interminable de terrazas que buscan el fondo del valle del rio Guadalquivir.. Regadas por el agua que mana bajo la ciudad a través de minados que durante siglos construyeron con inteligencia, para verter en una sinfonía de albercas comunicadas por regueros superficiales, constituyendo un ecosistema extraordinario e irrepetible, que surtía de hortalizas los mercados locales.


En la década de los setenta del pasado siglo, con la apertura del Merca Úbeda, nuestros mercados se inundaron de productos baratos procedentes de la agricultura intensiva de Almería y Murcia. Los hortelanos se vieron obligados a abandonar la actividad. Las huertas entraron en decadencia, y los olivos, apoyados con las subvenciones europeas, empezaron a sustituir las tomateras, patateras, lechugas, ajos, alcachofas, higueras y granados. El paraíso comenzó a tornarse en un lienzo igual que todas las campiñas de Jaén: en un desierto de olivos. Con la amenaza cierta de transformarse, si nos descuidamos, en urbanizaciones.

 

Sin embargo, para mi sorpresa, he descubierto hoy que aún resisten muchas hectáreas de huerta, cuidadas por románticos vinculados por el afecto a la tierra heredado de generaciones. Además tienen visión y ganas de recuperar ese gran espacio patrimonial de la ciudad. Porque estamos hablando de valores paisajísticos, pero también de valores etnográficos, ambientales, y arquitectónicos. Es en las huertas donde quedan los restos de las primeras iglesias cristianas de la ciudad, anteriores a Santa María, todas ellas extramuros.
Las soluciones pasan por una batería de acciones en varias direcciones al mismo tiempo. Una tiene que ser para revalorizar los productos hortícolas mediante cultivos ecológicos y etiqueta que certifique su procedencia. Otra pasa por favorecer las actividades complementarias turísticas y pedagógicas de la actividad agraria como complemento de renta, y para ello hay que realizar las modificaciones pertinentes del planeamiento urbano. Y finalmente es preciso recuperar el patrimonio presente en los muros de los caminos, las albercas, los minados, regueras, etc. Construyamos nuestro particular Generalife con el apoyo de todos.
 

viernes, 27 de enero de 2012

Vídeo sobre la entrega de premios

Ya podéis ver en la web IDEAL Úbeda un vídeo resumen sobre la entrega de los premios de la Asociación Plaza Vieja... Se reconoció en positivo al gremio de alfareros y en negativo al arqueólogo municipal... Además, fue impartida una conferencia sobre la desconocida cerámica azul ubetense.. Las imágenes y el montaje son del compañero Antonio Ángel Ruiz..


Link:http://link.brightcove.com/services/player/bcpid982198441001?bckey=AQ~~,AAAAFDJ-STk~,O_UTJPLxsFCyVlftGJGD0n7W7wC8OZxz&bclid=982259647001&bctid=1410504801001

miércoles, 25 de enero de 2012

Sin Comentarios: Aplaudamos el mal gusto de ALCISER en el casco histórico.

Los monolitos propagandísticos que han aparecido de la noche a la mañana en el casco histórico, y en concreto delante o cerca de edificios BIC (bien de interés cultural) de la ciudad.  Seguro que los han puesto porque eran muy necesarios para la ciudad ¿y para el turista?.



¿Por qué el León de Chocolate al arqueólogo municipal?


Plaza Vieja ha acordado otorgar el “Premio León de Chocolate 2012” al Arqueólogo Municipal por “la actuación de la Oficina Arqueológica de Úbeda en relación con el seguimiento arqueológico llevado a cabo en el proceso de construcción del espacio denominado Sinagoga del Agua”.

Plaza Vieja ha solicitado, sin obtener respuesta alguna, información a los dos últimos alcaldes de Úbeda sobre este espacio y ha organizado una mesa redonda con personalidades del ámbito del patrimonio histórico-artístico dirigida a buscar información y conocimiento sobre aspectos relacionados con su autenticidad. A este acto fue invitado el arqueólogo municipal para que aportara la información de que disponía, pero declinó la invitación.

Según uno de los gerentes de la empresa de servicios turísticos que gestiona este “hallazgo”, “se ha sacado a la luz y puesto en valor lo que se ha ido encontrando durante las obras "siempre con todos los permisos de obras y la supervisión del arqueólogo municipal”. Si eso es cierto, ¿por qué igualmente no se ha sacado a la luz pública toda esta documentación?

Pensamos que el caso de la "Sinagoga del Agua" es un caso insólito por el cúmulo de irregularidades reveladas en su nacimiento, una intervención que, hasta donde Plaza Vieja sabe, y a pesar de lo que aseguran sus administradores sin aportar documento alguno, ha carecido de cualquier seguimiento arqueológico, lo cual demuestra una vez más la incompetencia o desidia mostradas (algo a lo que ya nos tiene acostumbrados) por nuestro Ayuntamiento que, en este caso y de manera flagrante, no ha cumplido ni está cumpliendo con su obligación.

Mientras tanto, haciendo nuestras las tres preguntas que la Directora del Museo Provincial de Jaén y miembro de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de la provincia formuló en aquel acto, volvemos a repetirlas hoy a quien corresponda: 

¿Dónde está el informe arqueológico?, ¿quién lo hizo? y ¿dónde está el inventario?

martes, 24 de enero de 2012

Noticia periódico Ideal:Reconocimiento al gremio alfarero y reproche a la oficina arqueológica municipal


La Asociación Plaza Vieja, en defensa de Úbeda, Patrimonio de la Humanidad, entregó anoche sus dos premios anuales, uno destinado a destacar labores en positivo en lo referente a la riqueza patrimonial ubetense y otro enfocado a dar un toque de atención por algo que este grupo de ciudadanos considere poco adecuado o de dudoso acierto en el mismo ámbito.


Para ello se desarrolló un interesante acto público en la sala Julio Corzo del centro cultural Hospital de Santiago, que reunió a un buen número de personas y que incluyó una conferencia presentada bajo el epígrafe 'La vajilla azul de Úbeda'.


Fue pronunciada por Carlos Cano Piedra, investigador del Laboratorio de Arqueología y Arquitectura de la Ciudad (LAAC) y profesor de la Escuela de Arte de Granada, quien ha hecho un amplio estudio sobre la cerámica ubetense que en el futuro quedará reflejado en un libro.
Terminada la charla, se entregaron los galardones con presencia de los integrantes del colectivo, encabezados por su presidente, Alberto Sanfrutos. En positivo, el Premio Plaza Vieja 2011 se otorgó al colectivo de alfareros de Úbeda, integrado por Alfarería Tito, Alfarería Paco Tito e Hijo, Cerámica Alameda, Alfarería Melchor Tito, Alfarería Almarza y Alfarería Góngora. Hubo representación de la mayoría de ellos, y todos se mostraron satisfechos por esta distinción. El trofeo lo recibió el más veterano de los presentes, Miguel Alameda, y al resto les entregaron diplomas acreditativos.
Mantener la tradición


Con ello, Plaza Vieja reconoció al gremio más veterano de la ciudad, un grupo de artesanos y artistas llamados «maestros del vidriado, maestros de fabricar barro blanco, o maestros de alfarería», que han sabido «recuperar y mantener una rica tradición de siglos haciendo llegar hasta nuestros días ese patrimonio cultural y artístico que es el arte de la alfarería, y que no solo ha conservado intactas las técnicas, formas, diseños y materiales ancestrales, sino que además ha sabido investigar e innovar dentro de este maravilloso oficio para finalmente dar origen a una actividad plenamente creativa y actual».


Respecto al lado negativo, el Premio León de Chocolate 2011 fue para el arqueólogo del Ayuntamiento de Úbeda, Rafael Lizcano Prestel, en representación de la oficina arqueológica municipal, «por la actuación en relación con el seguimiento arqueológico llevado a cabo en el proceso de construcción del espacio denominado Sinagoga del Agua». El galardonado no dudó en asistir, gesto que se le agradeció, acompañado por algunos compañeros de trabajo y amigos.


Réplica


Con buen humor, que es como mejor se puede recibir este León de Chocolate, explicó que en el Consistorio no hay un servicio arqueológico específico e independiente y que su trabajo depende de Urbanismo, aclarando que ciertos estudios y responsabilidades recaen directamente en el promotor de una obra y no en los técnicos municipales. Además remarcó que existen otros organismos competentes en materia arqueológica y patrimonial, por ejemplo en la Junta de Andalucía, por lo que dijo que este premio estaba muy repartido.


Con esta mención, quizá demasiado centrada en una sola persona, Plaza Vieja volvió a incidir en que este nuevo lugar de visita de la localidad debió ser objeto de un mayor control y estudio desde el mismo momento en el que se intuyó su existencia para ser bien documentado antes de llevarse a cabo las obras que lo han puesto en valor. Se trata de un tema que ha venido suscitando cierta polémica desde hace unos meses.

Noticia Diario Jaén:"Plaza Vieja" distingue al colectivo de alfareros en sus premios anuales


El colectivo de alfareros fue el galardonado con el Premio Plaza Vieja 2011, y el León de Chocolate recayó en el arqueólogo municipal. La asociación hizo entrega de sus premios anuales dentro del marco de una conferencia sobre la vajilla azul de Úbeda.


El Hospital de Santiago albergó la entrega de los distintivos que concede cada año la Asociación en defensa de Úbeda Patrimonio de la Humanidad Plaza Vieja. En este caso, la plataforma quiso reconocer con el premio que lleva su nombre al colectivo de alfareros de Úbeda, integrado por las alfererías Tito, Paco Tito e hijo, Melchor Tito, Almarza y Góngora y Cerámica Alameda. El presidente, Alberto Sanfrutos, subrayó: “Nuestra asociación quiere premiar con este galardón al gremio más veterano de la ciudad, un grupo de artesanos y artistas como es el de los llamados ‘maestros del vidriado, maestros de fabricar barro blanco o maestros de alfarería’, que ha sabido recuperar y mantener una rica tradición de siglos haciendo llegar hasta nuestros días ese patrimonio cultural y artístico que es el arte de la alfarería”, y añadió: “No solo ha conservado intactas técnicas, formas, diseños y materiales ancestrales sino que, además, ha sabido investigar e innovar dentro de este maravilloso oficio para, finalmente, dar origen a una actividad creativa y actual”.


De igual modo se entregó el Premio León de Chocolate 2011, que recayó en el arqueólogo municipal, Rafael Lizcano. “Se le otorga por la intervención de la Oficina Arqueológica en relación con el seguimiento arqueológico en el proceso de construcción del espacio denominado Sinagoga del Agua. También se impartió la conferencia “La vajilla azul de Úbeda”, que corrió a cargo del doctor Carlos Cano. 

Reseña Diario Jaén:El pasado es solo el pretexto de las novelas históricas de Jesús Maeso


En una tierra libre, de Jesús Maeso de la Torre, da la vuelta al mundo. El ubetense, considerado uno de los escritores de novela histórica más importantes —con obras traducidas a varios idiomas—, ambienta este texto policíaco en torno al Cádiz de 1812. Colabora , además, con el Bicentenario de La Pepa.


Su nombre está entre el de los grandes de la novela histórica española junto con otros reputados escritores, amigos, como Arturo Pé-rez-Reverte, Toti Martínez de Lezea o su comprovinciano, Juan Eslava Galán, cuyo En busca del unicornio prendió sus inquietudes novelísticas. 


Creció en Úbeda, aunque vive, desde hace más de cuarenta años, en Cádiz, donde fue profesor. Vuelve a menudo —y siempre por Semana Santa— y firma cada semblanza de las solapas de sus libros como “Jesús Maeso de la Torre, natural de Úbeda (Jaén)”. Por eso le extraña, y aunque no se atreva a decirlo abiertamente, lo apena que sus aportaciones pasen de puntillas por las páginas culturales que se escriben en su provincia natal, a pesar de que algunos de sus personajes más laureados sean también originarios de ella. Como Al-Gazal, seudónimo por el que conocían a Yahía ben al-Hakam, “un árabe perfecto, que nació en Jaén en el 800”. Sus méritos como historiador y alquimista le merecieron el respeto del califa de Córdoba, a quien representó por el mundo hasta que se enamoró de la princesa Nur, en el “país de los vikingos”. El protagonista de su primera novela, Al-Gazal, el viajero de los dos orientes, traducida a al menos cuatro idiomas, “era un hombre maravilloso, y era de Jaén”, apunta Maeso. En Tartessos, convertida en un manual de estudios históricos en la Universidad de Toronto (Canadá), Hiarbas de Egelasta, nacido en una antigua ciudad cercana a Jaén llena de minas de plata, es el verosimil protagonista de una historia de aventuras. También el protagonista de La caja china —la próxima novela de Maeso, que todavía no ha visto la luz—, Rodrigo de Silva parte de estas tierras en época de Felipe II.


“He hecho muchos guiños a Jaén, y me gusta que mis paisanos los conozcan para saber de los ilustres personajes que poblaron su tierra”, manifiesta. Él aprovecha sus conocimientos históricos —es licenciado en Filosofía e Historia— para imaginar. “La historia es una excusa para escribir”, dice con humildad. Lo que él ve como un entretenimiento le valió para que Manuel Alvar lo incluyera entre los “recuperadores” de la novela histórica.


Se mueve ágil en las tinieblas de la España medieval, donde hurga con impunidad y enorme éxito. Ha presentado a miles de lectores atractivos personajes históricos, algunos olvidados, que le han servido para contextualizar historias policiacas, amorosas y de aventuras en tierras que un día fueron como las describe. 


Con La Cúpula del mundo consiguió el prestigioso premio de novela histórica de Caja Granada y con En una tierra libre, su última obra, para la que por primera vez se traslada hasta un pasado más reciente, el de la Constitución de 1812, recibió el Premio El Público a las Letras. Maeso presenta un Cádiz libre, despojado de tópicos para narrar lo que considera “el momento más importante de la historia de España”. En ese ambiente de incipientes libertades, liberales masones y guerras de guerrillas, se robaron las joyas de la corona, cuyo destino Maeso sitúa en Cádiz. Mientras su novela da la vuelta al mundo, él participa en los actos conmemorativos del Bicentenario de La Pepa como ponente y coordinador de mesas redondas. “Cádiz fue brillante, con bibliotecas y cafés. Ojalá su nombre vuelva a sonar”, desea mientras sueña en vivir a caballo entre su ciudad natal y la de acogida.

lunes, 23 de enero de 2012

Foto denuncia periodico Ideal:Destrozos en El Arco del Losal

Este es el lamentable aspecto que representa la capilla de la Cuesta del Losal.El abandono por parte del ayuntamiento y los actos bandálicos están acabando con una capilla con mas de 200 años de historia,en la que los vecinos trabajan y la cuidan en la medida de sus posibilidades,mientras que el ayuntamiento cierra los ojos. Situada en un enclave monumental da un aspecto pobre,y descuidado de nuestra cuidad, por donde pasan cientos de personas que nos visitan cada año y observan como se cuida el patrimonio en esta nuestra Úbeda "patrimonio de la humanidad".

sábado, 21 de enero de 2012

Los Premios Plaza Vieja 2011 en imágenes

Lo que mostramos a continuación son imágenes de la entrega de premios Plaza Vieja 2011. Los premios levantaron mucha expectación y la sala Julio Corzo del Hospital de Santiago se llenó totalmente debido a la gran afluencia de gente que acudió al acto, en torno a cien personas. A lo largo de la semana iremos desglosando el acto y comentando las diferentes intervenciones de las personas que participaron en él. De momento dejamos un avance en imágenes.

La gente va llegando al acto.


Conferencia de Carlos Cano sobre la Vajilla azul de Úbeda.

Entrega de un obsequio al ponente.

Entrega Premio Plaza Vieja 2011 y Premiados.







Foto de grupo de los premiados
Todos los alfareros de Úbeda unidos por vez primera en una sola foto 

Entrega del León de Chocolate a Rafael Lizcano

Rafael Lizcano dirige unas palabra al público asistente


PRESENTACIÓN DEL PREMIO A LOS ALFAREROS DE ÚBEDA

El diccionario de la Real Academia Española no se explaya mucho para definir lo que es la alfarería y lo hace con estas escuetas palabras: Arte de fabricar vasijas con barro cocido. Quizás es que el más antiguo de los oficios ejercido de manera ininterrumpida desde los tiempos en que ni siquiera existía la escritura no necesite de mayor explicación.

Este trabajo en apariencia tan simple, pero tan complejo, es capaz de combinar de manera magistral nada más y nada menos que los cuatro elementos de la Antigüedad: tierra, agua, fuego y aire, que en la Grecia clásica representaban la comprensión del cosmos y que gracias a las manos de una persona que les da forma se transmutan. Gracias a la experta intervención humana, este sencillo y humilde material moldeado y vidriado por el fuego ha sido capaz de atravesar milenios sin apenas deteriorarse, por lo cual esta actividad artesanal y artística ha pasado a formar parte del patrimonio de la humanidad por méritos propios.
La alfarería forma parte de la vida de Úbeda y es una de sus características más señeras, por la cual nuestra ciudad es conocida desde mucho antes de que fuera inscrita en esta lista mundial de la UNESCO junto con Baeza.

Por esta razón, Plaza Vieja ha querido este año reconocer, mejor aún, agradecer a estas personas que están esta noche honrándonos con su presencia, con este premio anual al gremio más veterano de la ciudad que no solo goza del reconocimiento personal por la labor diaria bien hecha, sino que sus miembros han obtenido los más prestigiosos premios nacionales e internacionales por ofrecernos su arte constantemente perfeccionado.

Plaza Vieja desea distinguir con este galardón a este grupo de artesanos que han sido llamados a lo largo de la historia: “maestros del vidriado, maestros de fabricar barro blanco, o maestros de alfarería” por haber sabido mantener y recuperar una rica tradición alfarera de siglos haciendo llegar hasta nuestros días ese patrimonio cultural y artístico que es el arte de la cerámica, y conservando intactas técnicas, formas, diseños y materiales ancestrales.

Pero no solo por esto, que ya es más que suficiente, sino porque no conformes con esta labor impagable, además, han sabido investigar e innovar dentro de este maravilloso oficio para finalmente dar origen a una actividad totalmente renovada y actual que se proyecta con paso firme en el futuro. Reflejo de esta puesta al día, de este hacer afrontando el futuro desde la sólida base de la tradición, es la presencia de todos ellos en Internet, con portales abiertos a todo el mundo.

Muchas gracias y nuestras felicitaciones a Cerámica Alameda, Alfarería Tito, Alfarería Paco Tito e hijo,  Alfarería Melchor Tito, Alfarería Góngora y Alfarería Almarza.

 
En representación de todos ellos recogió el premio Miguel Alameda.













miércoles, 18 de enero de 2012

II. El Patrimonio: La gestión de la Declaración de la UNESCO

El Formulario de la Declaración por la UNESCO de Úbeda y Baeza como ciudades inscritas en la Lista de lugares Patrimonio Mundial, en su página 75, reconoce el conjunto monumental de Úbeda, la Plaza Vázquez de Molina, con una extensión de 2,8 ha, la Plaza de Santa María y eje monumental de Baeza, de 2,7 ha.

Ambos conjuntos se sitúan en el corazón  de los respectivos recintos intramuros de las ciudades históricas, hoy todavía plenamente reconocibles, y en ellos se encuentran las mayores permanencias urbanas y arquitectónicas de su pasado, apenas transformadas por la ciudad contemporánea. Estos recintos se proponen como zonas o entornos de protección, con una extensión de 35,5 ha el de Úbeda y 14,3 ha el de Baeza.

El 5 de abril de 1999 los ayuntamientos de Úbeda y Baeza firmaron un acuerdo de colaboración que comprometía a ambas ciudades a desarrollar un Plan de Gestión coordinado en las materias de urbanismo, conservación y rehabilitación del patrimonio, cultura y turismo, con el objeto de mejorar las condiciones del entorno de los dos conjuntos monumentales, ya que éstos apenas si precisaban medidas de gestión dado su buen estado de uso y de conservación en ese momento. Es decir, hace ya nada más y nada menos que casi trece años nuestros gobernantes municipales afirmaban que se había iniciado una gestión en común del patrimonio urbano, la cultura y el turismo y se comprometieron entonces ambos ayuntamientos a que la responsabilidad de la gestión debería producirse a dos niveles:
1º.    Los ayuntamientos conjuntamente organizados en el Consorcio Úbeda-Baeza, para diferentes materias de coordinación recogidas en el Formulario y
2º.    La gestión última a escala supramunicipal para lo que se crearon en su momento una Comisión de Coordinación del Patrimonio Úbeda y Baeza, órgano de decisión política, y una Ponencia Técnica de Coordinación, compuesta por arquitectos municipales, funcionarios encargados de los negociados correspondientes, representantes del Consejo Asesor del Patrimonio Histórico-Artístico (constituido desde 1998 pero cuyo funcionamiento es un misterio), directores de las Escuelas Taller de Rehabilitación de ambas ciudades y técnicos de la Administración Autonómica.

En cuanto al fomento turístico de Úbeda y Baeza, se comprometieron a crear un Consejo Comarcal de Turismo para desarrollar, entre otras cosas, un Plan de Ordenación del sector.


Hace casi tres años se aprobaron los estatutos del Consorcio sin la unanimidad que Plaza Vieja demandaba. No obstante, calificamos entonces, ilusos de nosotros, de esperanzador y positivo el paso que se acababa de dar en este sentido y pedimos el máximo consenso entre las fuerzas políticas de Úbeda para que este órgano fuera un referente en la gestión eficaz del Documento de la Declaración de Patrimonio Mundial. Pues bien, a día de hoy no se ha producido ningún movimiento al respecto. Trece años desde que se anunció la exigencia de su creación y puesta en marcha, ocho y medio desde la Declaración de Úbeda y Baeza como ciudades Patrimonio Mundial, cuatro bajo gobierno del Partido Popular, otros cuatro años de gobierno socialista en ambas ciudades y medio año más con las flamantes corporaciones surgidas de los últimos comicios municipales es un plazo más que sobrado para que los Órganos de Gestión común Úbeda-Baeza fueran ya una realidad.

En enero de 2012, Plaza Vieja continúa preguntando como quien pregunta al viento y, por tanto, sin obtener respuesta alguna si es que funcionan, dónde y cuándo se reúnen -si es que lo han hecho alguna vez- y cuáles son las memorias de actuación de estos organismos.

La no respuesta nos confirma algo que nos suponíamos ante esta pasividad a la hora de generar los órganos de gestión conjunta: que el hecho de ser Patrimonio de la Humanidad tan solo se reduce a habernos convertido en una marca turística que, sin duda, genera beneficios económicos a ambas ciudades, pero desgraciadamente no se ha avanzado nada en la implicación de la población para garantizar la conservación, la difusión de sus valores y la asunción colectiva de tan importante compromiso con la UNESCO.

Ahora podemos buscar la excusa de que la situación económica no es la más propicia para grandes proyectos inversores, pero creemos que el Consorcio debe funcionar con miras más lejanas que éstas. Lo importante es que se convierta en un marco estable de debate y participación sobre la gestión de la Declaración y sobre las acciones que se llevan a cabo en esa parte tan sensible de las dos ciudades. Puede que se haya perdido una gran ocasión para la puesta en marcha del órgano conjunto.


El establecimiento de estos órganos de gestión y coordinación es obligatorio y no puede demorarse por más años. Si no se ponen en marcha, empezaremos a creer que la Declaración solo ha servido, repetimos, para generar una marca para la explotación turística y no para generar una oportunidad inmejorable para su conservación. Aunque sea al margen de las administraciones supralocales, los Ayuntamientos de Úbeda y Baeza deben hacer realidad el deseo compartido de hacer funcionar el Plan de Gestión coordinado.

Noticia Ideal de Jaén: Santo Domingo 'del Escorial'

Dicen de algo que se dilata en el tiempo más de lo previsto -o que parece que no tiene fin-, que «dura más que la obra de El Escorial». Y eso es lo que está pasando con las obras de la antigua Iglesia de Santo Domingo, en la capital, que por distintas vicisitudes no termina su proceso de rehabilitación, a pesar de que en un principio estaba previsto que las obras concluyesen en el año 2008.

Las primeras intervenciones en el edificio se desarrollaron en septiembre de 2002 para reparar los desperfectos en los muros laterales y en la capilla derecha, provocados por los agentes climáticos. Pero fue ya en el año 2005 cuando se empezó a hablar del gran proyecto previsto para este gran edificio. En diciembre de ese año se informaba de que la iglesia -cerrada al culto desde el año 1975- albergaría el contenido de la exitosa exposición 'La arquitectura del Renacimiento en Andalucía; Andrés de Vandelvira y su época', que se había celebrado en la Catedral de Jaén trece años antes, con motivo de la Expo'92. Entonces se hablaba de que en 2006 se liberarían 200.000 euros (de un total de 900.000) en los presupuestos andaluces para iniciar las obras de rehabilitación y redacción del proyecto del futuro Centro de Interpretación del Renacimiento.

La primera fecha que se marcó como la posible para la finalización de las obras fue 2007. El 1 de febrero de 2006, Jesús Romero Benítez, entonces director general de Bienes Culturales de la Consejería de Cultura, fijaba como probable mediados de 2007, para que la intervención en el edificio estuviera culminada. Se definía el edificio en aquel momento como «uno de los espacios más artísticos de Jaén y que puede tener usos culturales... la idea es que ... se inaugure a mediados de 2007, una exposición itinerante que se encuentra dentro del proyecto 'Andalucía Barroca 2007'». Siguieron las obras (basadas principalmente en una intervención de choque en el interior del templo; su comunicación con el claustro y con el exterior; consolidación del inmueble y de sus elementos ornamentales, etc.), y ya en enero de 2008, en la página web de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, se anunciaba que el edificio serviría para cerrar la exposición itinerante 'Andalucía Barroca', que se mostraría entre el 1 y el 30 de marzo de ese año.

Nuevo retraso

Pero no fue así. Unas semanas antes de la fecha prevista para la inauguración de la muestra se anunciaba que finalmente la intervención en Santo Domingo se dilataría hasta finales de año (2008). El anuncio se produjo durante una nueva visita de Jesús Romero Benítez. En esos momentos, el proyecto de rehabilitación había conseguido intervenir en las cubiertas y en las bóvedas, para recuperar su yesería; se había recuperado la policromía original de las mismas y se había liberado el sotocoro. Quedarían pendientes la pavimentación y la instalación de los dispositivos necesarios para cumplir las funciones como espacio cultura (seguridad, iluminación, equipos de sonido, etc.). En esa visita, el director general de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía anunciaba que el espacio podría albergar actividades culturales de todo tipo (conciertos, magnas exposiciones, actividades de carácter polivalente, etc.). Pero llegó diciembre de 2008, el proyecto acumulaba un retraso de año y medio y aún quedaba mucho por hacer, de manera que la muestra 'Andalucía Barroca' se tuvo que trasladar a la Catedral de Jaén.

Ha comenzado el año 2012 y el proyecto sigue inconcluso. Es más, las obras están paradas. Mercedes Valenzuela, delegada provincial de Cultura, señalaba esta semana que el proyecto sigue siendo «una prioridad» para la administración andaluza, pero que una serie de inconvenientes que surgieron durante la intervención obligaron a replantear el proyecto. Según Valenzuela, durante la rehabilitación se detectó que era necesario recalzar uno de los muros laterales; esto obligó a paralizar el resto de las acciones, y en estos momentos el trabajo en Santo Domingo está parado. Las necesidades planteadas requieren de una acción superior a los 400.000 euros; ya ha culminado la fase de estudio, y el proyecto está pendiente de adjudicación. La delegada de Cultura señala que hasta el momento se han invertido en el proyecto de Santo Domingo 1.955.172 euros, y que todavía habrá que librar al menos los cerca de 400.000 euros necesarios para la acción en el muro lateral dañado. Respecto al uso definitivo del edificio, Valenzuela señala que no está definido aún, y que junto a las distintas posibilidades que se han apuntado en los últimos años, también se podría realizar otra acción complementaria, como la ampliación del Archivo Histórico Provincial, que también forma parte del conjunto. Lo que sí tiene claro la Junta de Andalucía, -insiste la delegada- es que «Santo Domingo sigue siendo una prioridad, y es consciente de las posibilidades de este espacio». Así que sólo queda seguir esperando.

lunes, 16 de enero de 2012

Sin Comentarios: ¿Una plaza monumental o un apeadero?


Nos da mucha pena el aspecto que muestra la Plaza del Pópulo, también llamada de Los Leones, en Baeza. Aquello más que un lugar monumental parece un apeadero de autobuses, sin olvidar el impacto que causa en la plaza el tren turístico que, como opinan muchos turistas "más que una ciudad monumental esto parece un parque temático". En Úbeda tampoco empezamos a diferenciarnos mucho de Eurodisney. Lo dicho: una pena.

Noticia Diario Jaén: El centro de Baeza solo se abrirá para vehículos con autorización

El centro de Baeza, protegido por la Unesco al ser Patrimonio de la Humanidad, solo será de libre acceso de lunes a viernes no festivos y de ocho de la mañana a tres de la tarde. El resto del tiempo solo podrán entrar coches autorizados, de emergencia, además de clientes de hoteles.Con la medida se protege este entorno monumental privilegiado.



La joya de la corona del rico patrimonio baezano, su centro histórico, es recorrida, un día cualquiera, por más de dos mil vehículos. De hecho, la pasada Nochevieja, una jornada no lectiva, la cruzaron más de 2.500 coches, según los datos del propio Ayuntamiento. Mucho humo y ruido en un entorno privilegiado destinado para el paseo y el disfrute, que, además, está protegido por la Unesco. Allí se encuentra la iglesia de la Santa Cruz, uno de los pocos templos románicos del sur de España; el Palacio de Jabalquinto, una maravilla del gótico, o la Catedral, una iglesia mayor que coloca a Baeza a la altura de capitales de provincia, algo que no es habitual en municipios que no tienen esa condición. Mucho monumento, pero poco sitio para estacionar vehículos. Además, en la zona hay más de un hotel, un instituto y una de las sedes de la Universidad Internacional de Andalucía. Por eso, como reconoce la Administración baezana, hay que proteger este conjunto monumental, y para ello se limita el tráfico rodado.

La fórmula elegida es vigilar la entrada de automóviles con cámaras controladas por la Policía Local. El acceso será libre de ocho de la mañana a tres de la tarde, de lunes a viernes lectivos, como precisan desde el Ayuntamiento. El resto del tiempo solo podrán acceder vehículos autorizados, que serán los residentes y las emergencias. En cuanto a los establecimientos hoteleros, se pactará con estos negocios cómo se realizará la entrada de los clientes a los aparcamientos de los que disponen. Los monitores ya están listos para revisar el paso de los coches, según el Gobierno local, aunque todavía no se sancionarán los incumplimientos de las limitaciones. Para comenzar a concienciar de esta novedad a los ciudadanos se pondrá en marcha una campaña de difusión, con lo que se pretende que todos los vecinos identifiquen sus vehículos. De hecho, el Ayuntamiento tiene previsto presentar el proyecto de forma oficial de manera inminente. Esta decisión es similar a la que se ha adoptado en otras ciudades con un rico legado arquitectónico, como son los casos de Salamanca, Córdoba o Granada, y además se trata de una iniciativa pionera en la provincia de Jaén. La necesidad de proteger el patrimonio baezano obliga al Ayuntamiento a garantizar la conservación del casco histórico en torno a la Catedral y la fachada sur del término municipal, que se asoma a Mágina, y por ello se aprovechó la implantación de la fibra óptica en el casco histórico para instalar cámaras con las que regular la circulación. Otra de las medidas que impulsan los responsables baezanos es el traslado de la orujera que hay en el antiguo camino de Jaén, en la fachada sur de la ciudad, por su impacto visual y las molestias que origina a los vecinos.

sábado, 14 de enero de 2012

El pozo bajo la escalera: La Iglesia de San Millán, crónica de toda una historia y de una tragedia que se puede evitar.

Articulo de Manuel Jesús Lizana, historiador y socio de Plaza Vieja.

(Imágenes del campanario obtenidas del informe de Francisco López Marín) 


El conocimiento de la existencia de la parroquia de San Millán es prácticamente milenario, estamos hablando de que en época musulmana ya se conocía la presencia de esta comunidad siendo, de las tres parroquias cristianas, la única que se conserva. 


En este caso estamos hablando de su desenvolvimiento en una zona concentrada fuera de la muralla, extramuros, donde no están acogidos a la ley intramuros y se encuentran a merced de los enemigos y bandidos que pudieran generar estragos en sus propiedades. 


Tras la reconquista, parece ser que el prior solicitó el nombramiento de la misma como colegiata, lo cual llevó a pleitear con Santa María de los Reales Alcázares para ver quién obtenía los derechos, siendo claramente como sabemos Santa María la triunfal, tal y como nos cuenta Ruiz Prieto en su historia de Úbeda. 


En el siglo XIII se va a construir una iglesia románica de la cual nos queda poco, ya que fue remodelada en los siglos XVI y XVII para crear un templo con tres naves de las cuales solamente se llegó a construir el ábside, aprovechando los restos materiales reutilizados de la construcción anterior y los elementos no demolidos, lo cual denota dos ideas: o bien la búsqueda de una asequible reforma, o bien la falta de recursos que obligó a terminar la remodelación como se pudo. Es en este siglo cuando se suprime su artesonado de estilo mudéjar por una falsa bóveda, debiendo la configuración de sus capillas a una reforma acometida durante el siglo XVII. 


De la fábrica románica procede también un interesante elemento que es el campanario de la iglesia, orientado hacia el noroeste y con un grosor en sus muros de piedra que hace pensar que fuese algún tipo de torre adelantada, cosa que solo se puede encuadrar dentro de las hipótesis. 

El aspecto que ofrece hoy en día el templo, aunque remodelado por las desapariciones y modificaciones que lo afectan a lo largo de su larga historia, se podría enmarcar dentro del llamado mudéjar zaragozano, contando con el ya citado campanario del siglo XIII, una sola nave con una bóveda de arista del siglo XVI que vino a sustituir a un artesonado de madera mudéjar, al igual que su ábside, lugar en el que se encuadra una hornacina de estilo renacentista probablemente para la veneración del titular del templo, realizados en 1580, bajo la dirección del arquitecto Solís, de la que procede el arco de la sacristía de estilo renacentista. 


Su capilla mayor fue construida bajo el patronato de los Garrido en el siglo XVII y contaba con unretablo del XVIII, ya desaparecido. Posee también una serie de capillas laterales, algunas de las cuales muestran arcos apuntados de estilo mudéjar.


La historia de la iglesia de San Millán siempre ha estado muy vinculada con la cofradía más antigua de la semana santa ubetense, la de Nuestra Señora de la Soledad que es también la de los alfareros y albañiles, con especial vinculación a este barrio, tal y como vemos en las fiestas del barrio que se celebran el día de la Ascensión, tal y como se ve en esta fotografía, en la que apreciamos las calles engalanadas y la imagen de Nuestra Señora de la Soledad, obra de Amadeo Ruiz Olmos, procesionando con el arco mayor de la Iglesia como fondo


Paradójicamente, esta cofradía de los albañiles y alfareros ve el templo de sus titulares en un estado malo de conservación, a causa de problemas estructurales en el campanario que se encuentra en una situación precaria.



Según el informe emitido por el Hermano Mayor, Francisco López Marín, el lamentable estado del campanario hace que sea necesario un llamamiento tanto a la conciencia ciudadana, que también se podría encuadrar dentro del llamado “Patrimonio Mundial” como institucional ya que es un factor fundamental que los ciudadanos e instituciones protejan el que es el campanario más antiguo de la ciudad y que requiere una intervención importantísima. 


El campanario, con su cubierta de cuatro vertientes,  se encuentra muy deteriorado por la acción zoológica de las palomas, lo cual representa un grave riesgo para su conservación, a lo que además debemos sumar los problemas derivados de las condiciones meteorológicas en las que el viento y la humedad, unidas a la ausencia lógica de impermeabilización, generan una serie de daños que hacen que peligre la integridad del campanario. Los materiales empleados en su ejecución son catalogados en el informe como “deficientes”, factor que unido a los anteriormente mencionados agrava aún más el problema. 


Otro de los problemas que se presentan, según el informe, es el de un pequeño ventanal en la parte superior del campanario que tiene como finalidad acceder al tejado para su mantenimiento, cosa que parece ser innecesaria en la actualidad y que, por contra, representa un foco importante de entrada de agua y animales, lo cual únicamente serviría para garantizar la menor duración de la restauración que se pueda aplicársele, por lo que se propone su demolición. 


Las actuaciones propuestas, además de la demolición de la ventana de acceso al tejado, son la desmantelación de la cubierta, ya que en ella se han detectado una serie de filtraciones que hacen que algunas de las vigas de madera, de poco valor arquitectónico según el informe, se encuentren en un estado de podredumbre tal que las puede conducir al colapso, haciendo que el material de la cubierta se precipitase sobre la base del campanario. Por esta razón, se debería actuar primeramente para sustituir y arreglar la cubierta, cambiando si fuera preciso la estructura portante (solo en caso de deterioro absoluto), colocar una lámina de impermeabilización y proceder a su reconstrucción, colocando en ella, una vez finalizadas las obras, alguna malla metálica o dispositivo que permita repeler las palomas para hacer que en el futuro generen el menor daño posible. 


En este sentido, el informe está firmado por el Hermano Mayor en su condición profesional como arquitecto técnico colegiado. El problema se suscita cuando el aspecto personal se mezcla con el profesional, pues en su informe Francisco López muestra su opinión objetiva como arquitecto, mientras que por otro lado él tiene una implicación personal en este tema ya que es, como se ha apuntado más arriba, el Hermano Mayor de la cofradía más antigua de la Semana Santa de Úbeda, que tiene su sede en este templo, y ve cómo la integridad del campanario peligra día tras día, sin que la cofradía sea la responsable de este templo, y deseando que se le dé una solución en la que los miembros de la Soledad están dispuestos a contribuir en la medida de sus posibilidades, del mismo modo que otras veces han hecho. 

El amor que la cofradía de los albañiles tiene por su casa hace que donen su tiempo y su esfuerzo para reparar su templo en varias ocasiones viéndose limitados en esta ocasión por los medios necesarios, que consisten en un andamiaje que representa un gasto inasumible para la hermandad y buscando por ello una solución en el propietario, el Obispado de Jaén, en las instituciones públicas y en todos los organismos que puedan prestar ayuda para paliar tan desesperada necesidad. Se ha planteado una solución tripartita en la que la cofradía aportaría la fuerza de trabajo dejando al propietario del templo y a las instituciones oficiales los gastos de la obra tales como materiales y andamiaje, pero de momento no ha habido respuesta. 



El deber como ubetenses es dar respuesta a las súplicas de la cofradía no desde un punto de vista sólo religioso, para salvar una iglesia, sino para proteger un monumento que forma parte del patrimonio de todos, por el que en parte fuimos declarados con esa distinción de la UNESCO y pedir que las instituciones oficiales se movilicen para dar respuesta a un acuciante problema que pone en peligro una importantísima parte de nuestra historia.







viernes, 13 de enero de 2012

Conferencia sobre "La Vajilla azul de Úbeda" y entrega de premios Plaza Vieja

El viernes día 20 de enero a las 20:00 horas en la sala Julio Corzo del Hospital de Santiago se procederá a la entrega de premios de Plaza Vieja 2011.Además, con motivo del premio, se impartirá una conferencia por parte de D. Carlos Cano Piedra cuyo titulo es "La Vajilla azul de¨Úbeda".

miércoles, 11 de enero de 2012

I.El Patrimonio: del pasado, su disfrute y el futuro. El patrimonio eclesiástico.


La declaración por la UNESCO de nuestra ciudad junto con Baeza como Patrimonio de la Humanidad fue la culminación de un empeño largamente sentido. Sin embargo no está del todo claro lo que tal reconocimiento a veces debiera significar para la ciudadanía en su conjunto.
Por supuesto que cada ubetense se alegra de que la existencia de nuestra ciudad sea más notoria en el mundo y de que, al mostrar su magnífico acervo monumental, tenga mejor acogida. Otra cosa es si desde que se produjo este nombramiento se ha contemplado el conjunto de compromisos adquiridos con esa humanidad pasada, futura y forastera.
El pasado año nos satisfizo destacar este aspecto relacionado con el conocimiento de lo nuestro premiando la labor divulgadora que desarrolla el Museo Arqueológico de Úbeda, para que nuestra gente más joven y para que todas aquellas personas que se interesen por este tema conozcan nuestro Patrimonio. No es la primera actividad en ese sentido aunque debieran ser más para que, tras el conocimiento crítico, nazcan el cariño, la admiración y el respeto de todos los ubetenses por esos bienes que han de compartir con turistas y legar a sus descendientes.
Conviene, sin embargo, atinar de manera equilibrada para combinar el respeto al pasado, con la conservación enriquecedora para el futuro, y con el bienestar y progreso del vecindario actual. Alguien ha dicho que una ciudad es como una persona a la que gradualmente van apareciendo las arrugas con la edad. Lo acertado es compaginar esas señales con la placidez de la sabiduría acumulada. Ello no obvia para que se conserven incluso los excesos de la tradición. No debiera cargarse sólo sobre los hombros del vecindario del casco antiguo la conservación respetuosa que se desea habitado para favorecer su conservación idónea.
Estaría bien a ese respecto extremar el rigor de la versión que se ofrece a propios y extraños sobre la realidad histórico-cultural, los servicios, los precios y todo aquello -no son pocas las tentaciones que se les presentan a los advenedizos- que pudiera desprestigiar en poco tiempo este excelente Patrimonio. El desarrollo económico motivado por la mayor afluencia de turistas es un bien colectivo que debiera administrarse para satisfacción del conjunto de la ciudad y con más perspectiva de futuro.
En lo que se refiere al importante patrimonio de la Iglesia Católica, con numerosas propiedades urbanas acumuladas a lo largo de los siglos, Plaza Vieja cree que, como dueña o depositaria de este rico patrimonio, la Iglesia debe hacer frente a importantes gastos de rehabilitación y de mantenimiento ordinario, que no siempre acomete, por lo que la mayoría de las veces se da el caso de que el peso de la restauración, rehabilitación y conservación de dichos bienes eclesiásticos recae sobre diferentes programas nacionales y autonómicos ejecutados por las administraciones públicas y privadas.
En Úbeda tenemos como ejemplo las ingentes cantidades que tanto el Ministerio de Cultura del Gobierno central, en su día, como la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, han venido destinando a la reconstrucción, con mayor o menor fortuna (probablemente con menor), de la colegiata de Santa María de los Reales Alcázares. No tenemos constancia de que el Obispado haya puesto un duro para que, por fin, todos los ubetenses y los que nos visitan estemos de nuevo disfrutando de este espacio para usos culturales o, en su caso, religiosos. El Cabildo jienense, su propietario, debería colaborar, al menos en una pequeña parte, en la conservación de estos bienes patrimoniales. Iglesias como la de San Pedro, Santo Domingo, San Millán, la ermita de Paje y, especialmente, San Lorenzo, muestran un mal estado de conservación generalizado y están pidiendo a gritos una urgente actuación so pena de que nos convirtamos en testigos de su irreversible deterioro o, en el peor de los casos, como es el de San Lorenzo, de su desaparición.
El Plan Especial de Protección del Casco Histórico refleja desde hace muchos años como pendiente “la restauración de la iglesia de San Lorenzo y algunos lienzos o paños de muralla;” e incluye este edificio dentro del programa de “Expropiación y adecuación de edificios históricos para uso dotacional”, insistiendo en su necesaria restauración. El Formulario de la Declaración de Úbeda y Baeza como ciudades Patrimonio Mundial reitera su uso dotacional. El  Ayuntamiento efectuó una oferta de compra de esta iglesia al Obispado de Jaén y procedió, para evitar males mayores, a restaurar la muralla que soporta este templo con fondos públicos provenientes del Plan E. Pensamos que esta singular iglesia debe pertenecer a todos los ubetenses a corto plazo, para lo cual las negociaciones entre el Alcalde de Úbeda y el Obispo de Jaén, ahora parece ser que suspendidas, deben culminar cuanto antes. Y puesto que se va a utilizar el dinero de todos los contribuyentes (católicos y no católicos), todos los ubetenses debemos ser los beneficiarios últimos de su puesta en funcionamiento como lugar de cultura en la forma de centro de interpretación de la obra de nuestro escritor más eximio, Antonio Muñoz Molina.
El patrimonio de la Iglesia Católica en Úbeda es rico, extenso y hermoso, y, puesto que su correcta conservación depende casi en exclusiva de los fondos públicos, debe comenzarse a negociar la copropiedad entre los que lo conservamos, representados por las diferentes administraciones públicas, y sus actuales poseedores. 

martes, 10 de enero de 2012

Noticia El Condado Ahora: Plaza Vieja distingue la labor del colectivo de alfareros


El próximo viernes 20 de enero tendrá lugar la entrega de los premios Plaza Vieja y León de Chocolate de la Asociación en Defensa de Úbeda Patrimonio de la Humanidad, "Plaza Vieja". El pasado 13 de noviembre, los miembros asistentes a la Asamblea General de socios y socias decidieron por unanimidad conceder el Premio Plaza Vieja al colectivo de alfareros de Úbeda. Asimismo, el León de Chocolate 2011, el cual pretende ser una llamada de atención, ha sido otorgado al Arqueólogo Municipal del Ayuntamiento de Úbeda, Rafael Lizcano.




El objetivo de estos galardones, tal y como informan desde Plaza Vieja es premiar la labor "de instituciones o personas que se han destacado por sus diferentes grados, sensibilidades, puntos de vista o maneras de trabajar por la conservación del patrimonio histórico artístico, cultural, social y medioambiental de Úbeda".




La entrega de premios tendrá lugar a las 20:00 horas en el Palacio Don Luis de la Cueva. En dicho acto se ofrecerá una conferencia sobre "La vajilla azul de Úbeda" a cargo del Doctor Carlos Cano Piedra, investigador del Laboratorio de Arqueología y Arquitectura de la Ciudad, LAAC, y profesor de la Escuela de Arte de Granada. Finalizado el acto, se ofrecerá una pequeña colación y copa para los asistentes. 




Premiados
El Premio Plaza Vieja 2011 ha sido otorgado al colectivo de alfareros de Úbeda integrado por Alfarería Tito, Alfarería Paco Tito e hijo, Cerámica Alameda, Alfarería Melchor Tito, Alfarería Almarza y Alfarería Góngora. La asociación ha querido premiar con esta distinción “al gremio más veterano de la ciudad, un grupo de artesanos y artistas como es el de los llamados 'maestros del vidriado, maestros de fabricar barro blanco, o maestros de alfarería' que ha sabido recuperar y mantener una rica tradición de siglos haciendo llegar hasta nuestros días ese patrimonio cultural y artístico que es el arte de la alfarería, y que no sólo ha conservado intactas técnicas, formas, diseños y materiales ancestrales, sino que además ha sabido investigar e innovar dentro de este maravilloso oficio para finalmente dar origen a una actividad plenamente creativa y actual".




Por otro lado, el Premio León de Chocolate 2011 ha sido concedido al Arqueólogo Municipal del Ayuntamiento de Úbeda, Rafael Lizcano Prestel, "por la actuación de la Oficina Arqueológica de Úbeda en relación con el seguimiento arqueológico llevado a cabo en el proceso de construcción del espacio denominado Sinagoga del Agua".

Plaza Vieja Comunica: Cambio del lugar de la entrega de premios

Comunicamos que la entrega de premios Plaza Vieja y León de Chocolate 2011 cambia de ubicación y, en lugar de realizar el acto en el palacio D. Luis de la Cueva, lo celebraremos en la sala Julio Corzo del Hospital de Santiago el próximo viernes, 20 de enero a las 20:00 horas.


Estáis todos invitados.

lunes, 9 de enero de 2012

Noticia Diario de Córdoba: El yacimiento de Morana (Córdoba) peligra por los expolios


Los constantes expolios están poniendo en peligro el yacimiento arqueológico de Morana, en Lucena. Este yacimiento fue declarado el 6 de marzo del año 2000 Bien de Interés Cultural y desde el Ayuntamiento lucentino se han venido realizando distintas gestiones que posibiliten la compra o permuta del mismo a su dueños. A lo largo de este tiempo se han producido cambios en la propiedad de estos terrenos, lo cual ha dificultado que fructifiquen unas negociaciones que nunca han llegado a buen puerto.


Morana es un yacimiento arqueológico de enorme interés y uno de los más importantes de su tiempo en la zona sur de la provincia. Sin embargo, con el paso de los siglos, el pillaje y los expolios han dejado sus nefastas huellas en lo que en su momento fuera un recinto fortificado importante. Prueba de ello es que se tiene constancia de que en las laderas de Morana hubo un asentamiento humano en el siglo IX antes de Jesucristo. En esta área había junto al núcleo urbano de la época de los íberos otra zona dedicada a necrópolis. 


Morana se encuentra en un área apartada del término municipal de Lucena, camino de la aldea de Jauja y a escasa distancia del paraje natural de la Laguna Amarga. Desde hace siglos han sido numerosos los historiadores y amantes de la arqueología que se han venido interesando por un lugar que se ha conservado en buena medida debido a su lejanía de las carreteras. Sin embargo, ello no lo ha preservado totalmente de los expolios. Por ello son numerosas las personas que vienen demandando una mayor vigilancia, así como el vallado de las fincas, cuya superficie ronda las 25 hectáreas

Noticia Diario Jaén: Los años empiezan a pesar en las casas de los barrios más antiguos


El casco antiguo posee algunos de los rincones más bellos de la ciudad pero, a tenor de las continuas quejas de sus residentes, también algunos de los más sucios o con las casas en peores condiciones. Los colectivos vecinales no cejan en su empeño de exigir a las administraciones públicas, en especial al Ayuntamiento, que preste más atención a una de las zonas más turísticas de la capital.

Las asociaciones de vecinos pertenecientes al casco antiguo de la capital jiennense llevan años con las mismas reclamaciones: solares abandonados que son foco de basura y alimañas, poca limpieza y casas cada vez más antiguas que necesitan una reparación so peligro de derrumbarse.

Las grietas y las humedades son, desde luego, visitantes asiduas. Las viviendas, en su mayoría con muchos años a sus espaldas y con escasas reformas estructurales, acumulan desperfectos. Algunas están abandonadas, pero sus problemas llegan a “contagiar” a las anexas, que sí pueden estar habitadas. Barrios como La Merced, San Juan, Faldas del Castillo o La Magdalena presentan muchos casos, pero también otros como La Alcantarilla, donde los deslizamientos y los corrimientos de tierras implican, a su vez, el resurgimiento periódico de grandes grietas que, en algunos casos, han llevado al desalojo, temporal o permanente, de los residentes de las casas afectadas.

Pero los vecinos tienen más quejas, referidas a la limpieza, sobre todo, y a la dejadez mostrada por las administraciones públicas, en general. “En todas las ciudades andaluzas, los cascos antiguos son las zonas que más cuidadas están, y es lógico, porque son las más transitadas, las que más turistas tienen y las que dan una buena imagen”, comenta una vecina de La Merced que reside en la calle Joaquín Costa. “Yo lo que quiero para mi barrio es eso mismo, o que por lo menos esté limpio”, añade. Ella y otras mujeres de la calle barren y friegan todas las semanas la calle para tenerla “en condiciones”, pero, aun así, no es suficiente.
Mientras tanto, los vecinos no se quedan de brazos cruzados. El pasado mes de diciembre, cinco asociaciones vecinales se reunieron para debatir con técnicos y expertos las soluciones para dar viabilidad y un fuerte empuje al futuro del casco antiguo. Finalmente, trasladaron las conclusiones al Ayuntamiento para que de la teoría se pase a la práctica cuanto antes. Antonio Heras /Jaén

La humedad “se apodera” de las paredes en la calle Joaquín Costa

Los propietarios de casas y de primeros pisos y bajos en la calle Joaquín Costa tienen desde hace décadas un problema que no tiene visos de acabar: las humedades. A pesar de las reformas que emprenden, el agua vuelve a aparecer. Por ello, demandan al Ayuntamiento la renovación de las canalizaciones.

La calle Joaquín Costa, situada en el barrio de La Merced, es una estrecha vía peatonal por la que apenas pueden circular dos personas a la par. Tiene el encanto de lo antiguo, y en la mayoría de su recorrido se ve, allá en lo alto, una de las torres de la Catedral.

Sin embargo, los residentes, lejos de despreciar las bellas vistas y el emplazamiento de sus domicilios, tienen un asunto mucho más inmediato e importante del que preocuparse: las humedades, que afectan, especialmente, a las viviendas situadas a ras de suelo o en las primeras plantas. Algo que sucede desde hace décadas pero que nadie parece capaz o dispuesto a atajar hasta la fecha. La causa estriba, según explican los vecinos, en unas canalizaciones que no han sido renovadas por completo desde hace “cuarenta años al menos”. Así lo afirma Magdalena Pérez, que se vio obligada, incluso, a instalar un aljibe con una bomba extractora de agua en su bodega para evitar las continuas inundaciones que sufría.

Pese a todo, la humedad invade muebles de madera y paredes, y las grietas reaparecen tras las periódicas capas de yeso y pintura. “Hasta la ropa, dentro de los armarios, acaba oliendo a humedad”, explica esta vecina de La Merced. “He escrito al Ayuntamiento y a la compañía del agua, y ni caso”, lamenta Pérez. Enfrente de la casa de Magdalena vive Carmen Ruiz. Al entrar en el portal se nota un inconfundible olor a humedad y, en las paredes, los desconchones deslucen el aspecto de unas zonas comunes que se pintaron hace poco.

Similar situación vive Natividad Vargas, unos metros más abajo. El portal presenta los clásicos desperfectos causados por la presencia del agua tras la pared, tanto a ras de suelo como en los tramos de madera de las escaleras —con aspecto de podredumbre—, mientras que, dentro de su vivienda, el dormitorio y el pasillo también sufren las humedades. Son solo tres ejemplos de una dinámica que se repite a lo largo de toda la calle, y los vecinos empiezan a estar hartos.

Dolores Garrido

Una vecina de La Alcantarilla pide regresar a su hogar “antes de morir”

Dolores Garrido tiene 78 años y una idea fija en la cabeza: volver a su casa, en la que vivió durante más de medio siglo y en la que crió a sus cuatro hijos. Un grave problema de grietas hizo que los técnicos del Ayuntamiento la precintaran parcialmente hace ya cuatro años e impidieran su habitabilidad mientras no se acometieran profundas obras de reparación. Desde entonces vive en un piso y, aunque el alquiler se lo paga la Corporación, ella solo desea regresar a su domicilio de la calle Jardín de la Violeta, donde la esperan sus muebles y sus recuerdos. “Mi madre dice que quiere morirse en esa casa”, afirma Consolación Lozano, una de sus hijas.

El caso viene de muy atrás. Hace “más de doce años”, según cuenta Consolación, hicieron unas obras en la calle Ladera de San Ramón —perpendicular a la de Jardín de la Violeta— para “dar salida” a la carretera del Puente de la Sierra. “Desde entonces empezaron a salir muchas grietas, cada vez más”, afirma Lozano. “Luego está el suelo, que por lo visto en esta zona se mueve mucho, y agrava el problema”, añade. Las rajas más profundas aparecieron en la cocina, el baño, la terraza y el garaje. “Un día estaba cocinando y se cayó el plafón, que por suerte no me dio”, cuenta Dolores. A partir de ese momento tuvo que abandonar su hogar. Se trata del único desalojo de un barrio que ha convivido con grietas y deslizamientos en la última década. Mientras muchas de las casas de alrededor eran reparadas gracias a un acuerdo entre la Junta y el Ayuntamiento, y la propia Ladera de San Ramón sufría una profunda reforma, la vivienda de Dolores permanecía abandonada. La luz al final del túnel llegó en 2010, cuando el Ayuntamiento aprobó en pleno el arreglo de la casa por algo más de 100.000 euros. Dos años más tarde, las obras no han comenzado y el dinero presupuestado se ha esfumado. El cambio del equipo de Gobierno tampoco ha beneficiado a los intereses de Dolores Garrido.

Noticia Digital Jienense: Asociación en Defensa de Úbeda, Plaza Vieja, distingue la labor del colectivo de alfareros



La asociación ubetense entrega sus premios anuales el próximo 20 de enero. -El León de Chocolate ha sido otorgado al Arqueólogo Municipal, Rafael Lizcano




El próximo viernes, 20 de enero, tendrá lugar la entrega de los premios Plaza Vieja y León de Chocolate de la Asociación en Defensa de Úbeda Patrimonio de la Humanidad, Plaza Vieja. El pasado 13 de noviembre, los miembros asistentes a la Asamblea General de socios y socias decidieron por unanimidad conceder el Premio Plaza Vieja al colectivo de alfareros de Úbeda. Asimismo, el León de Chocolate 2011, el cual pretende ser una llamada de atención, ha sido otorgado al Arqueólogo Municipal del Ayuntamiento de Úbeda, Rafael Lizcano.


El objetivo de estos galardones, tal y como destacan desde Plaza Vieja es destacar la labor "de instituciones o personas que se han destacado por sus diferentes grados, sensibilidades, puntos de vista o maneras de trabajar por la conservación del patrimonio histórico artístico, cultural, social y medioambiental de Úbeda".


La entrega de premios tendrá lugar a las 20:00 horas del viernes 20 de enero en la sala Julio Corzo del Hospital de Santiago. En dicho acto se ofrecerá una conferencia sobre "La vajilla azul de Úbeda" a cargo del Doctor Carlos Cano Piedra, investigador del Laboratorio de Arqueología y Arquitectura de la Ciudad, LAAC, y profesor de la Escuela de Arte de Granada. Finalizado el acto, se ofrecerá una pequeña colación y copa para los asistentes. 


GALARDONADOS
El Premio Plaza Vieja 2011 ha sido otorgado al colectivo de alfareros de Úbeda integrado por Alfarería Tito, Alfarería Paco Tito e hijo, Cerámica Alameda, Alfarería Melchor Tito, Alfarería Almarza y Alfarería Góngora. La asociación ha querido premiar con esta distinción “al gremio más veterano de la ciudad, un grupo de artesanos y artistas como es el de los llamados 'maestros del vidriado, maestros de fabricar barro blanco, o maestros de alfarería' que ha sabido recuperar y mantener una rica tradición de siglos haciendo llegar hasta nuestros días ese patrimonio cultural y artístico que es el arte de la alfarería, y que no sólo ha conservado intactas técnicas, formas, diseños y materiales ancestrales, sino que además ha sabido investigar e innovar dentro de este maravilloso oficio para finalmente dar origen a una actividad plenamente creativa y actual".


Por otro lado, el Premio León de Chocolate 2011 ha sido concedido al Arqueólogo Municipal del Ayuntamiento de Úbeda, Rafael Lizcano Prestel, "por la actuación de la Oficina Arqueológica de Úbeda en relación con el seguimiento arqueológico llevado a cabo en el proceso de construcción del espacio denominado Sinagoga del Agua".