Vicente Salvatierra
Cuenca, Catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Jaén, máxima
autoridad universitaria de la provincia de este periodo histórico, y, en su día, redactor de la Carta Arqueológica
de Úbeda, ofreció una conferencia el pasado día 6 de julio en el Salón de Grados de
la UNED de Úbeda, organizada por la Asociación en Defensa del Patrimonio “Plaza
Vieja”.
Su conferencia versó
sobre las comunidades judías en Jaén y Úbeda, dividiéndola en dos partes: Una
primera dedicada a Jaén capital y una segunda a Úbeda.
Toda su intervención
estuvo basada en las fuentes documentales históricas y las excavaciones
arqueológicas, que son las herramientas para la investigación científica. Lo
que no está fundamentado en métodos científicos solo son especulaciones y muchas
preguntas sin respuesta.
En relación con las
comunidades judías en Jaén, repasó su evolución desde la época visigoda hasta
el siglo XVI. Reflejó la importancia de esta comunidad en la capital, ubicada alrededor de las calles de San Andrés y Santa Cruz. Sobre la sinagoga
de esta judería de Jaén, que algunos sitúan en la actual iglesia de San
Andrés, el profesor Salvatierra se pronunció al respecto descartando esta posibilidad por carecer de base científica y
defendiendo, por contra, que dicha iglesia fue construida sobre una antigua mezquita. La sinagoga, según
Salvatierra, estaba muy cerca de esta iglesia, lo que después fue la iglesia de
la Santa Cruz, hoy desaparecida.
En relación con las
comunidades judías en Úbeda, al igual que en el caso de Jaén, explicó su
ubicación y evolución en el casco urbano desde el siglo X al XVI . Afirmó que
siempre estuvo ubicada en la zona del Alcázar, alrededor de la plaza de Carvajal, próxima
a una de las puertas de la ciudad que arrancaba en la actual calle del Prior Monteagudo.
Abordó también dos asuntos
polémicos, aseverando con firmeza que las Estrellas de David, que algunos equivocadamente interpretan como propias de la simbología hebraica, son, sin embargo, símbolos cristianos y, por esta razón, las
casas de Úbeda que tienen en sus puertas este símbolo, no pueden ser consideradas en absoluto casas judías, afirmación que fundamentó
desarrollando con profusión múltiples argumentos en este sentido.
Sobre la llamada
“sinagoga del Agua” aseguró que no existe fuente
documental alguna, ni de cualquier otro tipo, sobre la que se pueda argumentar la existencia de una sinagoga en ese espacio
urbano de Úbeda; antes al contrario, sí dijo disponer de la información técnica de la Consejería de Cultura
donde se establece que no existe el menor indicio de la condición de sinagoga en
términos históricos de este edificio, ni que posea ningún otro valor patrimonial, porque, de haber
sido así, “se le habría caído el pelo al propietario” al no haberse producido notificación
legal alguna a la Delegación de Cultura durante las obras, informe
arqueológico, ni documentación al respecto. Para el catedrático Vicente Salvatierra, se trata una nueva construcción que puede que pretenda asemejarse a una sinagoga, pero que carece de valor patrimonial.
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